Caja Rural de Jaén ha celebrado la clausura de su programa piloto de voluntariado corporativo, una iniciativa que ha unido a empleados, entidades sociales y beneficiarios en torno a un objetivo común: generar un impacto positivo en la provincia a través de la solidaridad, la formación y el compromiso activo.
La iniciativa, desarrollada en el marco de la campaña “Kms Solidarios”, ha servido como punto de partida para lo que será a partir de septiembre un programa estable de voluntariado corporativo dentro de la Estrategia de Sostenibilidad de la entidad.
El evento se ha celebrado en la Sala de Presidencia del Parque Científico y Tecnológico Geolit y ha contado con la asistencia de los máximos responsables de nuestra entidad y representantes de las entidades colaboradoras y varios de los voluntarios participantes. El presidente de Caja Rural de Jaén, Juan Núñez Pérez, junto al director general adjunto, Álvaro Martínez Rodríguez, presidieron el acto y reconocieron públicamente la labor de los trabajadores voluntarios y de las tres asociaciones sociales beneficiarias:
Aprompsi (Asociación pro Personas con Discapacidad Intelectual).

Daño Cerebral Adquirido.

Ales Jaén (Asociación para la Lucha contra las Enfermedades de la Sangre).
Más que deporte: una red de solidaridad
Uno de los momentos más emotivos del acto fue la intervención de Javier Sánchez Gragera, representante de los voluntarios y quien alcanzó el mayor número de “kilómetros solidarios” recorridos durante la campaña. Sánchez destacó que la iniciativa «va mucho más allá del deporte; nos permite hacer equipo, unir esfuerzos y colaborar directamente con entidades y colectivos que realmente lo necesitan».
El programa no solo ha tenido un componente deportivo y de visibilización social. También ha incorporado actividades de educación financiera dirigidas a escolares y personas con discapacidad intelectual, en colaboración con Aprompsi. En estas sesiones, los empleados voluntarios ofrecieron charlas y talleres prácticos para fomentar la inclusión, el conocimiento y la autonomía económica.
Un compromiso que trasciende lo financiero
Durante su intervención, el presidente de Caja Rural de Jaén subrayó el impacto real de este tipo de acciones:
“Acciones como estas nos acercan a las verdaderas necesidades de nuestro entorno y nos recuerdan que, más allá de nuestro papel financiero, tenemos la responsabilidad de contribuir activamente a la mejora de nuestra sociedad”.
Asimismo, quiso dedicar unas palabras de reconocimiento a las entidades sociales implicadas, afirmando que “su trabajo es esencial para construir una sociedad más inclusiva, más justa y más humana”.
El voluntariado, parte estratégica de la Caja
El cierre del acto sirvió también como anuncio oficial: el Consejo Rector de Caja Rural de Jaén ha aprobado la continuidad y consolidación del Programa de Voluntariado Corporativo, que se relanzará en septiembre de 2025 con nuevas líneas de acción social, formativa y comunitaria.
Esta iniciativa se enmarca dentro del eje social de la Estrategia de Sostenibilidad de la entidad, fortaleciendo su perfil como banco ético, responsable y cercano al territorio. El éxito del piloto, tanto por su impacto externo como por la alta valoración interna de los empleados participantes, ha sido clave para este paso decisivo.
Mirando al futuro con paso firme
Caja Rural de Jaén reafirma así su compromiso con las personas, demostrando que la banca, cuando pone en el centro a la comunidad, puede convertirse en un agente de cambio social. Lo que comenzó como un proyecto piloto se transforma ahora en un programa con vocación de continuidad, participación y crecimiento, que promete seguir sumando kilómetros solidarios —y, sobre todo, impacto real— en los próximos años.